Arquitectos de Brijuni

Estos arquitectos nos estuvieron hablando de su trayectoria, tanto de formación, como profesional; estuvieron hablándonos de problemas con los que se encuentran los arquitectos en la calle en el día a día, problemas que puede que no se enseñen en la escuela.

Tras todo esto comenzamos un debate en el que los arquitectos nos formularon una pregunta que me pareció bastante interesante: ¿deben adaptarse los arquitectos al resto de la gente o la gente a los arquitectos?

Este tema me dio mucho que pensar y en mi opinión hay varias respuestas correctas siempre que estén bien argumentadas.

En un principio pensé que en el punto medio esta la virtud y que por tanto la una debería de de adaptarse a la otra en un porcentaje de 50% cada una, pero esto sería un caso muy hipotético y siendo realistas bastante utópico.

Tras darme cuenta de la imposibilidad de esta adaptación a partes iguales pensé que era la gente las que debía adaptarse a la arquitectura, puesto que la arquitectura es un arte que no debe estancarse, debe ir progresando y por tanto también irán cambiando las formas de vida de la gente aunque de una forma un tanto forzada y acelerada.

Pero puestos en el punto de vista anterior, este progreso forzado puede resultar bastante incomodo para las personas que habitan en una casa con una determinada arquitectura, por tanto, estamos ante un grave problema, puesto que la arquitectura debe facilitarnos nuestra vida diaria, hacernos estar cómodos dentro de la arquitectura, en nuestra casa, en nuestro edificio de trabajo o cualquier otro edificio.

Por tanto pienso que este es el razonamiento que creo más valido, cabiendo aquí el progreso, las nuevas tendencias, pero siempre de una forma muy paulatina.